Quise
con su fantasma
ocultar su cuerpo
mucho tiempo caminé
como si a cada paso
atravesara un espejo
algunas noches
no miraban mis ojos
más que sus ojos
abiertos de una forma espantosa
nunca la ausencia fue mayor
que cuando su cuerpo se escondía
en mis brazos
buscando encontrarla
irremediablemente
me perdí
creció el abismo en mí
como la panza de una mujer
preñada
Antonio Sustaita.
Friday, October 24, 2008
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